El tratamiento de ondas de choque para la celulitis, también conocido como terapia de ondas acústicas o terapia de choque, es un procedimiento no invasivo que se utiliza para combatir la celulitis y mejorar la apariencia de la piel.
Este procedimiento se basa en la aplicación de ondas acústicas de alta energía sobre las áreas afectadas por la celulitis. Dichas ondas penetran en los tejidos profundos de la piel, rompiendo las células de grasa, estimulando la producción de colágeno y mejorando la circulación sanguínea y linfática. Como resultado, se reduce la apariencia de la celulitis y la piel adquiere un aspecto más liso y firme.
El tratamiento de ondas de choque es sumamente eficaz para los tipos de celulitis, edematosa (causada por la retención de líquidos) y la celulitis adiposa (causada por el exceso de grasa). En el caso de celulitis fibrosa (caracterizada por tejido fibroso y nódulos duros) puede que sea necesario complementar el tratamiento de ondas de choque con terapia manual o criolipólisis. Es importante destacar que el grado y tipo de celulitis puede variar según cada paciente, por lo que los resultados pueden ser diferentes en cada caso.
Los pacientes indicados para este tratamiento son aquellos que presentan celulitis en diferentes grados y desean mejorar la apariencia de su piel. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el tratamiento de ondas de choque puede no ser recomendable para mujeres embarazadas, personas con trastornos de coagulación, enfermedades vasculares o infecciones en el área a tratar. Recuerda siempre consultar a un profesional médico antes de someterse a cualquier procedimiento estético.
¿Qué efectos producen las ondas de choque?
Cuando se aplican las ondas de choque en el área específica a tratar, se producen efectos mecánicos y biológicos en los tejidos.
Efecto MECÁNICO: Las ondas de choque generan una presión mecánica en el tejido, lo que provoca microtraumatismos controlados. Estos microtraumatismos estimulan la respuesta natural del cuerpo, activando la producción de colágeno, mejorando la elasticidad de la piel y rompiendo las células de grasa.
Aunque el término «microtraumatismo» puede sonar preocupante, es importante destacar que estas lesiones son controladas y no causan daño alguno ni lesiones en los tejidos. En cambio, la intención es estimular la respuesta de curación natural del cuerpo.
Efecto BIOLÓGICO: Las ondas de choque estimulan la circulación sanguínea y linfática en el área tratada. Promueven la vasodilatación, mejorando el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno y nutrientes a los tejidos. Además ayuda a eliminar toxinas y desechos metabólicos, lo que puede reducir la retención de líquidos y mejorar el aspecto de la piel afectada por la celulitis.
Zonas a tratar y beneficios
Las ondas de choque se pueden aplicar en diferentes zonas del cuerpo para eliminar la celulitis. Es importante destacar que las zonas de aplicación pueden variar según las necesidades individuales de cada persona.
Nuestros profesionales médicos evaluarán tu caso específico y determinarán las áreas más adecuadas para aplicar las ondas de choque en función de tus necesidades y objetivos de tratamiento.
Algunas de las zonas de aplicación más comunes son:
MUSLOS – GLÚTEOS – ABDOMEN – BRAZOS
Muchos son los beneficios de este tratamiento, sencillo seguro y duradero.
Reducción de la apariencia de la celulitis: Las ondas de choque actúan sobre los tejidos afectados por la celulitis, rompiendo las células de grasa y estimulando la producción de colágeno. Esto ayuda a reducir la apariencia de los hoyuelos y la textura irregular de la piel asociada con la celulitis, mejorando su aspecto general.
Mejora de la firmeza y elasticidad de la piel: Estimulan los fibroblastos, las células responsables de la producción de colágeno y elastina. Esto aumenta la síntesis de colágeno y elastina, lo que mejora la firmeza y elasticidad de la piel tratada. Como resultado, la piel se vuelve más tersa y suave.
Estimula la circulación sanguínea y linfática: Mejora la circulación sanguínea y linfática en el área tratada, ayudando a eliminar toxinas y desechos metabólicos, reduciendo la retención de líquidos y mejorando la aportación de oxígeno y nutrientes a los tejidos. Una mejor circulación contribuye a una piel más saludable y a la reducción de la celulitis.
Activa la regeneración celular: Las ondas de choque pueden estimular la actividad celular en los tejidos tratados, lo que promueve la regeneración y reparación de los mismos.
Resultados duraderos: Los efectos de las ondas de choque no son solo temporales, sino que pueden durar a largo plazo. La estimulación del colágeno y la mejora de la circulación en los tejidos tratados se traducen en beneficios duraderos, lo que significa que los resultados obtenidos pueden mantenerse durante un período prolongado de tiempo.
Tratamiento no invasivo: Lo que significa que no requiere cirugía ni incisiones en la piel. Es una opción segura y prácticamente indolora en comparación con otros procedimientos más invasivos, como la liposucción u otros tratamientos quirúrgicos.